
Fotografías: Celia Suárez
Diseñado por el arquitecto brasileño Paulo Ribeiro y el diseñador de interiores Patryk Walczak crearon un espacio elegante y acogedor en Barcelona. El proyecto Casa Baro nace desde la pasión de combinar el glamour de lo clásico de los años setenta con la calidad de lo artesano. De esta manera, creando un ambiente nuevo y único.
Dentro del departamento se pueden encontrar algunos espacios diseñados y decorados al detalle con diferentes elementos. Al entrar al departamento se podrá encontrar la sala de estar, que ha sido decorada con elementos como una obra original de Henar Iglesias, ganadora de un premio de Contemporania Barcelona y con una pieza del artista catalán, Roger Coll, en la mitad de unas mesas vintage que se complementan con un sillón inspirado en Vladmir Kagan. Cada una de las piezas que decoran este espacio se complementan perfectamente, no solo a través de la paleta de colores tierra, pero a través de su estilo clásico y elegante.

La cocina y el comedor mantienen la misma paleta de colores en tonos tierra, creando un ambiente inusual para una cocina moderna. Los gabinetes, hechos de vidrio negro le dan un toque único al espacio siendo el elemento principal del mismo. Dentro de la cocina igualmente se encuentra la mesa del comedor igual hecha del mismo vidrio que los gabinetes y con unas espectaculares sillas originales de los años 70 con toques dorados.

La habitación principal, decorada con un mural japonés de Coordoné Barcelona, mesas de noche igualmente originales de los años 70 y unas lámparas de Iñigo Sutil Alcauzar incrustadas con cristales de Tiffany, es el espacio de descanso perfecto. En el baño, por otro lado, predomina el mármol verde que se combina con madera y metal. El espacio es decorado con dos esculturas disruptivas de cerámica de Isabelle Mackay Sim que crean un contraste interesante y divertido.

Casa Baro busca combinar la elegancia de los elementos vintage de los años 70s con lo moderno y minimalista, lo cuál da un resultado interesante pero de excelente gusto. Al utilizar piezas de artistas locales contemporáneos, así como elementos decorativos originales de la década de los 70s, se crea un espacio que no solo refleja la elegancia, si no la atemporalidad de las piezas que tienen un propósito y son bien utilizadas. Además de tener espacios completamente funcionales y acogedores, Casa Baro esta llena de detalles. Así convirtiéndose en un espacio lleno de comodidad y estilo.
A través del diseño y la decoración Paulo y Patryk han logrado generar una experiencia de vida de lujo y comodidad. Cada detalle de Casa Baro está pensado para combinar lo clásico y lo moderno a través del color, la artesanía y las piezas vintage únicas y hacen que el espacio sea como ningún otro encontrado en Barcelona.
